-¡¡¿Queee?!!, lo dirás en broma.
-De broma nada - dijo señalándome con la pipa - venga deja ya de quejarte, saca el carbón, los pasteles y ponte manos a la obra.
- Pero...
La mirada "asesina" que me lanzó, fue suficiente para que me callara, sacara los pasteles y me pusiera manos a la obra.
Hoy por hoy, volviendo la vista atrás, reconozco que gracias a su cabezonería, a su buena guía, y a mi esfuerzo, el resultado fue muy aceptable para él (aunque se que le gustó mas de lo que me dijo), y mas que sorprendente para mi.
En muchas ocasiones tiramos la toalla antes de empezar.... yo estuve a punto, pero tuve la suerte de contar con alguien que no me dejó hacerlo.
Gracias Gensi por ser mas cabezota que yo.
¡¡Feliz semana familia!!...y hasta el próximo post.